Ponga una gallina en su vida | César-Javier Palacios

No sé si será la crisis o la preocupación por comer sano, ambas cosas a la vez e incluso una tercera posibilidad, la necesidad de mantener un mínimo vínculo de unión entre nuestra vida urbana y el no tan lejano mundo rural. Tras la aparición de las primeras macetas con hierbas aromáticas y posteriormente de los pequeños huertos en terrazas, nuestra sociedad está dando el gran salto hacia las gallinas. Poco exigentes y muy productivas, estas aves son las recicladoras perfectas de los desechos orgánicos caseros, milagrosamente convertidos en espléndidos huevos que, como un regalo de la naturaleza, nos encontramos por las mañanas a la puerta de casa. Resulta sorprendente, pero cada vez con más frecuencia las gallinas se están convirtiendo en nuevas mascotas… que ponen huevos. Las puedes tener en un rincón del jardín, incluso en una terraza o azotea, te ayudan a la sostenibilidad medioambiental del hogar y te deparan el intenso placer gastronómico de degustar unos huevos fresquísimos y sanos como nunca antes los habías probado. Como complemento, con su estiércol natural nuestra huerta ecológica producirá más y mejor que nunca.

En realidad no resulta nada complicado hacerse con este nuevo animal de compañía tan beneficioso. Sin embargo, ya hay en España al menos dos empresas que ofrecen la posibilidad de conseguir por Internet el kit completo del criador de gallinas. Y como la experiencia, novedosa para muchos, puede ser más complicada de lo inicialmente previsto, ambas ofrecen un “servicio de alquiler de gallina con derecho a compra”, evitando así problemas de posibles abandonos de las nuevas mascotas en las calles.

En alquilaunagallina.com alquilar una gallina, con bebedero, jaula, paja y comida incluidos, sale por 63 euros al mes, 49,50 euros si lo haces a través de alquilogallinas.es. Pasado este plazo, el cliente tiene la opción de quedarse en propiedad el animal. Deberá entonces desembolsar unos 150 euros más, pero a cambio se queda con todo el equipamiento y recibe además una gallina extra. Aunque no necesitan gallo para poner huevos, el segundo animal doblará nuestra producción casera, mejorando la calidad de vida de la primera inquilina, a fin de cuentas animal social como nosotros.  Y ya puestos, podremos incrementar si queremos nuestra granja con mascotas tan poco habituales en las ciudades como pavos, cerdos vietnamitas o conejos. Para los niños no habrá mejor regalo.

Varios amigos míos ya tienen en los jardines de sus casas gallinas y hasta cabras. Cuando me invitan a cenar, esos huevos fritos, esa leche y ese queso son los manjares más fabulosos que pueden ofrecerme. La idea de copiarles me atrae muchísimo, aunque tengo un problema. Al viajar en avión ¿me dejarán llevar la gallina en una jaula como hago con los perros? En el caso de que eso sea posible, ya me veo este verano a más de uno paseando orgulloso su gallina por los aeropuertos de medio mundo.

César-Javier Palacios
Fundación Félix Rodríguez de la Fuente

2 comentarios:

Anónimo dijo...

http://www.institutohuevo.com/scripts/etiquetas.asp

En este enlaces explica la clasificacion de los huevos, y que significa la numeracion que lleban impresa segun el primer numero seran ecologicos, de granja en jaula etc

Huevos dijo...

Las gallinas han tenido más protagonismo y han estado acompañando siempre al hombre en la España de los abuelos y de sus padres... cuándo se vivía más en el campo, mis abuelos tenían corrales y me mandaban a por huevos de pequeño... que tiempos!! y con qué ilusión se recogían, pero con la España urbanita la mayoría de los niños pequeños sólo conocen a las gallinas en foto
Aunque si es verdad como dice el artículo (muy interesante por cierto) que las gallinas recuperan algo de presencia …

¡ Pon una gallina en tu vida ¡ ;)





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